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viernes, 15 de febrero de 2013

NOLI ME TANGERE


           
Escucha.

Ahora que escuecen las palabras, que el tiempo abrasa nuestros días y los sueños se han mimetizado y apenas forman parte del imaginario que cualquier serie de ficción norteamericana nos pueda ofrecer.

Ahora que las sábanas las remienda el viento que entra por la ventana al amanecer, a falta de otras manos, del tacto cálido de otras manos capaces de coser los pequeños agujeros por los que se filtran mis pesadillas, noche tras noche.

[Quisiera acariciar la corona de la Estatua de la Libertad, que las yemas de mis dedos sean atravesadas por sus dientes, porque el dolor de Manhattan fue el dolor  del Universo.

Yo sé que en Manhattan las nubes bajan a besar el suelo todos los días, el cielo de alquitrán que separa lo que podemos tocar de aquello que ya jamás tocaremos.

Iremos a morir a Central Park, junto al recuerdo de John Lennon.

Iremos a morir a Hyde Park, donde las ardillas llevarán nuestros féretros y los cisnes danzarán en torno a nuestros cuerpos desnudos para acompañar la ridícula orgía de los huesos.

O mejor, vayamos a morir a orillas de La Garonne, allí, entre las rosas y anaranjadas puestas de sol, desparramando nuestros violáceos cuerpos rendidos al ocaso.]

Ahora que parece que he despertado del letargo, que las horas han surtido efecto y que he soñado cómo moríamos juntos, encerrados en la misma nuez, en la misma concha y bajo el mismo sol.

Ahora sé que cuando nuestros cuerpos se toquen por primera y última vez reconoceremos la pureza, bañaremos nuestros cabellos en las mismas tibias aguas y gozaremos del amor en círculos concéntricos que, poco a poco, con el paso de las primeras lluvias, se convertirán en pequeños globos que nos alzarán a los Cielos.

Escucha, escucha la melodía de esta canción que te estoy tocando con esta guitarra de madera de palo santo que heredé de mi abuelo.

Escucha, escucha cómo tarareo nuestros nombres llegando al estribillo.

¿Has visto cómo tu piel se ha erizado al cantar la última estrofa? ¿Reconoces mis manos acariciando las cuerdas de la guitarra?

¿Las quieres tocar? ¿Las quieres tocar?