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viernes, 14 de marzo de 2014

Un poema de Olga Novo



NACER DE NUEVO

Extraña soy
sin duda.

Pero se me entiende mucho mejor
cuando dejo de hablar a la planta alucinógena
cuando con tus dedos puedo aún tocar
el cobre almacenado en mi hígado
cuando vuelve a nacer
y sobre todo
cuando me quedo callada
y me pongo a leer cuatro peras
al borde de un camino.

Olga Novo

Los líquidos íntimos.
Cálamo Poesía, 2013.

martes, 11 de marzo de 2014

Un poema de Natalia Litvinova






El viento tiene que cortar



El pez pronunció tu nombre bajo el agua.
Yo cabalgaba. Quería escapar de lo tatuado en el cuerpo.
Arañé el caballo para galopar más fuerte.
El viento tiene que cortar los tímpanos.
Pero tu nombre resonó.
Como los latidos del tambor en una tribu que espera lluvia.
Como el salpicar del agua cuando el salmón salta
contra la corriente.
Como el chasquido de los dientes del oso
ante la astucia del salmón.

Natalia Litvinova

Todo ajeno.
Vaso Roto, 2013.



lunes, 10 de marzo de 2014

Un poema de Tracy K. Smith



El alma

La voz es clara. Pesa. Como piedras
Abandonadas en aguas tranquilas, o caídas
Una tras otra de un muro bajo.
Quiebra cuanto recuerda.
No deja señales, pero las conserva.
Y el silencio que la rodea es una puerta.
Perforada por la luz. Una prenda
Que marca los senos, la intimidad
Entre los muslos. El cuerpo es lo que nos empuja
Tensándose al avanzar, bailando al alejarse.
Pero es la voz lo que nos invade. Incluso
Sin decir nada. Incluso sin decir nada.
Una y otra vez ausente de sí.

Tracy K. Smith


Vida en Marte.
Premio Pulitzer de Poesía 2012.
Traducción de Luna Miguel.

Vaso Roto, 2013.

domingo, 9 de marzo de 2014

Un poema de Sylvia Plath





¿Quién es este niño azul y furioso,
brillante y extraño, como caído de una estrella?
¡Lo mira todo lleno de cólera!
Se adentró en la habitación, con un grito en sus talones.
El color azul palidece. Es humano, a pesar de todo.
Un loto rojo se abre en su cuenco de sangre;
me están cosiendo con seda, como si fuese una tela.

¿Qué hacían mis dedos antes de tenerle?
¿Qué hacía mi corazón con este amor?
Nunca había visto nada tan leve.
Sus párpados son flores de violeta,
su respiración, suave como una polilla.
No le dejaré marchar.
No hay perversión ni engaño en él. Debe permanece así.

Sylvia Plath

Tres mujeres.
Traducción de María Ramos.
Ilustraciones de Anuska Allepuz.

Nórdica libros, 2013.